El Getafe no despierta

La caída del Getafe no se detiene. Pasan las jornadas y la situación no cambia. Ni si quiera la incorporación de un nuevo entrenador ha podido reanimar hasta la fecha a un equipo que parece caminar con paso firme hacia la Se gunda B. El Mallorca hizo lo justo, para derrotar al colista. Y no resolvió hasta el último cuarto de hora, con el segundo gol de Morales. Pese a marcar muy pronto, el equipo balear atravesó por fases de desconcierto que no fueron aprovechadas por los madrileños. El Getafe, muy romo en ataqué y con el síndrome del colista gravitando en el ánimo de sus jugadores, anduvo perdido.La rapidez de los ataques mallorquinistas causó muchos problemas a la defensa madrileña, sobre todo en los primeros 25 minutos. Fue entonces cuando los isleños crearon las mejores ocasiones. El gol de Maqueda despejó bastante el panorama para los hombres de Mané, que pudieron desplegar lo mejor de su fútbol con la tranquilidad de contar con el marcador a favor.

Al Getafe le costó coger su sitio en el campo, y sólo llegó con relativo peligro en dos ocasiones. La primera de ellas, en el minuto 14, cuando Kike salió a destiempo en un centro, y la segunda, a través de un disparo lejano de Javi Rey en el minuto 16.

El Mallorca pudo sentenciar el partido en la primera mitad, con dos oportunidades claras de Kientz y Morales en los minutos 25 y 30, respectivamente. Pero la defensa del Getafe estuvo muy atenta en ambas ocasiones.

El debú en el Luis SitJar de tres de los últimos seis fichajes realizados por el equipo balear -Dani y los serbios Stankovic y Petkovic- dio al Mallorca mayor movilidad y presencia en ataque, cuestión que notaron de forma especial Morales y Maqueda, los últimos hombres de la ofensiva mallorquinista.

El Mallorca buscó sentenciar el partido en la segunda parte, frente a un Getafe que estiró sus líneas y tuvo sus oportunidades. En el minuto 71, Montero encaraba, libre de marcaje, a Kike. Pero su disparo era repelido en el último momento por el portero. Al final, Morales sentenció el partido con el segundo gol, el séptimo de su cuenta, lo que le confirma como máximo realizador de su equipo.