Los chechenos demuestran sus amenazas radioactivas

Las dudas sobre si los guerrilleros chechenos pueden utilizar sustancias radiactivas para actos terroristas en territorio ruso se disiparon ayer para los millones de personas que vieron cómo un equipo de la televisión independiente NTV desenterraba un contenedor en un parque de Moscú después de que el comandante Shamil Basáiev dijera a una periodista de ese canal el lugar donde debía excavar. La radiación en la superficie del contenedor era de cinco roentgen por hora.Basáiev -el militar checheno que al mando de un centenar de guerrilleros se atrincheró el verano pasado en el hospital de Budiónnovsk con más de mil rehenes y que obligó al Kremlin a comenzar las negociaciones de paz en Grozni con los independentistas rebeldes- había advertido en diversas oportunidades que tenía sustancias radiactivas en su poder.

Su última advertencia data del pasado día 8. Entonces, Basáiev amenazó con desencadenar una serie de actos terroristas si recomenzaban las operaciones militares rusas a gran escala si fracasaban definitivamente las conversaciones de paz en Grozni y aseguró que sus hombres ya habían llevado a Rusia cuatro contenedores con sustancias radiactivas. Ayer desmostró que era verdad.

Como los responsables rusos de la seguridad radiológica respondieron que Basáyev no puede poseer semejantes sustancias y que ellos controlan la situación en Rusia, el comandante checheno decidió entregar uno de los contenedores para probar que decía la verdad.

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