10 asfixiados en una red de túneles franceses que los alemanes utilizaron como almacén de las V-1 y V2

La gruta de Monterolier, próxima a la ciudad francesa de Rouen, ha sido macabro escenario de la muerte por asfixia de 10 personas, tres de ellas menores. El drama comenzó el miércoles por la tarde, cuando Pierre, Nicolas y Thomas (los dos últimos, hermanos), de edades comprendidas entre los 13 y los 15 años, aprovechando la confusión de las celebraciones de la Fiesta de la Música, se aventuraron por esta red subterránea de túneles que los ocupantes alemanes utilizaron durante la 11 Guerra Mundial para almacenar sus bombas V-1 y V-2.

La asfixia de los niños se produjo, al parecer, por una enorme concentración de gas tóxico, óxido de carbono y, probablemente,. alguna otra sustancia desprendida de las armas que estuvieron allí almacenadas.

El padre de Nicolas y Thomas, al ver que los niños no regresaban, acudió a la gruta acompañado de un amigo, quien esperó fuera hasta que se decidió a llamar a los bomberos. Éstos llegaron a la entonces humeante boca de la gruta cuando ya oscurecía. Cuatro bomberos, entre ellos el médico del cuerpo, entraron de inmediato, protegidos con máscaras' de oxígeno que muy pronto revelaron su insuficiente protección, ya que sólo uno de ellos, agonizante, pudo volver a la superficie. En total, murieron los tres chicos y siete adultos.

La operación de rescate tuvo que suspenderse hasta la mañana de ayer, cuando pudo organizarse un sistema de ventilación de todo el laberinto subterráneo.