Loewe propone colores pálidos para el verano en el prólogo de la Cibeles

La firma Loewe se adelantó ayer a la inauguración oficial de la Pasarela Cibeles, que hoy se inicia en el Palacio de Congresos de Madrid, con una colección en la que dominan las sutiles combinaciones de colores pálidos.El desfile de Loewe convocó menos expectación que en ediciones anteriores. Las modelos, aparentemente escogidas de largas piernas y cuellos de cisne, aparecieron de aguamarinas y celeste, con una especie de babi escolar corto y muy escotado, que dio paso a las piezas de piel rebajadas de grosor, para hacerlas más llevaderas en verano. La pieza estrella de la colección Loewe fue el pantalón, para el que se propone un uso diversificado que va de la amplitud al ceñido, todos ellos terminados en vuelta. La otra propuesta interesante consistió en un abrigo corto, muy ligeramente entallado combinado con vestidos de la misma línea.

Rompiendo la tónica abrumadora de los tejidos lisos, Loewe presentó la seda pintada tipo mosaico en tonos muy pasteles, en una combinación de trajes pantalón con vestidos y faldas. No faltó la excentricidad, casi humorística, de un traje-bolso de piel vuelta, que fue muy aplaudido por el público.

Otras dos series revelaron cierta gracia; una de clara ascendencia oriental, con vaporosas chilabas; y otra inspirada en los famosos pearlies ingleses, los fanáticos del botón que a principios de siglo adornaban sus ropas con todo tipo de ellos. El desfile finalizó con dos series de fiesta; una basada en color arena y corpiños de perlas, donde volvió a aparecer la aspiración oriental, y los trajes largos de fórmula evasé, que dieron la única nota de color.