Cogido grave el banderillero Antonio Bejarano

El banderillero Antonio Bejarano, de la cuadrilla de Espartaco, sufrió una cogida de pronóstico muy grave al colocar un par de banderillas al cuarto toro de la segunda corrida de la feria de San Antolín, de Palencia, celebrada ayer. La cornada, en la ingle derecha, desgarra la vena safena y penetra en la pelvis, donde produce amplios desgarros. Tras ser operado en la enfermería de la plaza fue trasladado a un hospital de Palencia.El festejo resultó muy accideritado, pues también César Rincón sufrió una distensión de ligamentos en la rodilla derecha durante su faena al segundo toro de la tarde, que le voleteó de forma impresionante. Rincón mató al toro, del que le fue concedida una oreja antes de pasar a la enfermería. También Espartaco sufrió un fuerte varetazo sin consecencias en el transcurso del festejo.

Se lidiaron cuatro toros de Manuel Álvarez, un sobrero de Sánchez Arjona, corrido en segundo lugar, y otro sobrero de Andrés Ramos, en sexto lugar. Los dos sobreros sustituían a dos ejemplares del hierro anunciado, devueltos al corral por inválidos. Todos fueron mansos, flojos y peligrosos. Espartaco fue silenciado en su lote y en el que mató por Rincón. Oscar Higares tuvo aviso y ovación, y palmas.

Por otra parte, en la segunda de la feria de la Vendimia, de Requena (Valencia) salieron a hombros tras cortar dos orejas cada uno, Enrique Ponce y Litri. Finito de Córdoba cortó oreja. Lidiaron cinco toros de Atanasio Fernández, bien presentados, manejables y flojos, y uno de Cemuño, con complicaciones.