Florida se declara incapaz de afrontar el flujo de refugiados cubanos

El gobernador de Florida, Lawton Chiles, consideró ayer que la llegada de oleadas de refugiados cubanos supone "un auténtico estado de emergencia inmigratoria" y pidió al Gobierno federal que tomara las medidas correspondientes, porque el Estado de Florida, advirtió, no va a poder afrontar lo que se le está viniendo encima. El miércoles fueron rescatadas 537 personas que iban a bordo de casi medio centenar de embarcaciones de todo tipo. En los últimos seis días, los refugiados llegan a los 1.500, a pesar de los repetidos mensajes de Washington en el sentido de que no se va a tolerar una ma rea humana como la de Mariel en 1980.Lawton Chiles acusó a Fidel Castro de alentar la salida masiva de ciudadanos: "Cientos de personas, quizá miles, están en las playas cubanas, esperando para irse. No se hace ningún esfuerzo para detenerles. De hecho, parece como si se les estimulara". Testimonios de los refugiados llegados a las costas de Florida en los últimos días confirman esta apreciación, según José Basulto, director de un grupo de voluntarios que ayuda a rescatar refugiados de las aguas de Florida.

El gobernador insistió ayer en que la situación "está alcanzando proporciones críticas" y que es urgente tomar medidas. No obstante, la decisión de declarar el estado de emergencia corresponde al Gobierno federal. La Casa Blanca rebajó ayer la tensión contenida en el llamamiento del gobernador de Florida y calificó de "ordenada" la llegada de refugiados cubanos. La portavoz de la Casa Blanca, Dee Dee Myers, reconoció el incremento en el número de cubanos llegados a Florida en los últimos días, pero añadió que la situación se desarrollaba con normalidad.