Y Perico no estaba

¿Dónde estaba ayer a media tarde el hombre que volvió a despertar a los españoles en el Tour de Francia? Un anónimo y nada melancólico Pedro Delgado, el hombre que durante los últimos 11 años ha sido cita obligada en la gran ronda por etapas del mundo, disfrutaba a las seis de la tarde de un bien merecido baño en la piscina de su casa segoviana. "No estuve atento a la televisión desde el primer momento, simplemente alternaba el baño con la contemplación de la carrera. No he sentido ningún, tipo de melancolía, entre otras cosas porque no estaba en el ajetreo del comienzo del Tour. Me he sentido como en un día normal, como cuando estaba viendo el Giro desde casa".Pedro Delgado está apurando sus últimos momentos como ciclista profesional. La primera evidencia de que el final estaba cerca llegó unos días antes del comienzo de la Vuelta a España, cuando comenzó a hacer pública su intención de no acudir a la que ha sido siempre su gran cita, el Tour. Hay que tener en cuenta que Delgado fue considerado a lo largo de su carrera como un buen ejemplar de lo se ha llegado a denominar de hombre Tour. Sin embargo, el origen de la decisión de no ir al Tour data de julio del año pasado. "Mi primer pensamiento lo tuve a lo largo del Tour de 1993. Noté que los días se me estaban haciendo muy largos, que no era el mismo de otros años, que no me recuperaba de un día a otro. Estaba como en un pozo y necesitaba varias jornadas para salir de él. Iba muy justito. Así que me dije: 'Pedro, me parece que te van a ver poco el pelo por aquí'. La idea la he ido madurando a partir de entonces. Antes de comenzar la Vuelta ya le comenté a Echávarri que se fuera haciendo a la idea de mi ausencia en el Tour. Luego, durante la Vuelta, confirmé todas las sensaciones que había tenido en el pasado Tour: no recuperaba con facilidad, se me hizo muy larga, muy dura. No era una cuestión de tener miedo al Tour, era darse cuenta de que las carreras largas se me empezaban a atravesar, ya no las digería. Y pensé, si esto es en la Vuelta, cómo será en el Tour".

Delgado rechazó la invitación Para estar presente en la liturgia del comienzo de la gran ronda francesa. No lo acepta propósito. No quería vivir del sentimentalismo.