Los andamios del Acueducto de Segovia se quitarán el próximo otoño

Segovia En un plazo de cuatro meses desaparecerán los andamios que, desde el mes de julio de 1992, envuelven los arcos centrales del acueducto de Segovia, actualmente sometidos a un proceso de restauración, según ha afirmado el arquitecto director de las obras Francisco Jurado.Jurado, que habló sobre el mal de la piedra y el acueducto en unas jornadas científicas de la Asociación Meteorológica Española (AME), clausuradas ayer en Segovia, aseguró que no va a realizar ninguna sustitución de los actuales sillares, porque se podría provocar más daño al monumento. Jurado abogó por otros sistemas como el microcosido de las piedras, la limpieza o el enfundado, que consistiría en una operación similar a la de una pieza dental.

Después de intervenir de manera experimental en tres arcos, la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León, que ha invertido ya unos 200 millones de pesetas, procede ahora a restaurar los cuatro arcos centrales, ubicados bajo el sotabanco, los más expuestos a la contaminación y a las inclemencias meteorológicas. Precisamente, en esta zona del acueducto, un monumento declarado por la Unesco como patrimonio de la humanidad, partió la señal de alarma sobre el deterioro del monumento.