'Telebasura'

"Expertos en televisión creen que si el público quiere telebasura no se deben imponer otros gustos" (EL PAÍS, martes 22 de febrero de 1994, página 55).Del planteamiento del artículo concluyo: el tipo de programas que mayor índice de audiencia arrojan son los clasificados como telebasura. Luego el público quiere: ver telebasura. Démosle, pues, telebasura.

Propongo otro planteamiento: la televisión, como medio de comunicación de masas y forma inevitable de influencia sobre el público, modela los gustos de éste. A su vez, el público decide qué tipo de programas le interesan (como dice Modesto Saavedra, "con el mando a distancia se ejerce el derecho a voto"). O sea, un proceso circular. No es el público el que decide (el mercado no es el rey).

Muchas veces se ha hablado de la negativa influencia de la televisión sobre los niños. ¿Vamos a ser tan ingenuos como para creer que a los adultos no les influye también? Por supuesto, es una influencia relativa. También en cierta medida el mercado influye. Lo que no se ve, no se programa (véase El peor programa de la semana, eliminado hace poco de la programación, entre otras razones, por falta de audiencia. Dicho sea de paso, yo debería sentirme responsable, aunque sólo fuese en parte. No vi ni una sola vez ese programa).

Ahora bien, si anteponemos los intereses económicos a la educación e influencia en potencia positivas de la televisión (y otros mass media, como ciertas revistas), entonces consigamos la grabación de la ejecución de John Thanos (mismo diario, misma fecha, misma página, artículo de al lado). Con eso nos forramos seguro. El negocio del siglo. Encima, con un apellido como ése: Thanos... -