Incorporaciones masivas en Mallorca

El PSOE de las Islas Baleares ha investigado recientemente la entrada masiva de nuevos militantes en diferentes agrupaciones locales, coincidiendo con el periodo precongresual en el que, además de procederse a la elección de delegados, se determinará la correlación de fuerzas.

"El caso de León lo vivimos aquí meses atrás", reconoció ayer el secretario general de los socialistas baleares, Joan March. En concreto, hace unos meses se cuestionó el ingreso de un centenar de personas en la importante agrupación socialista de la localidad de Llucmajor, la tercera en número de afiliados de las islas y que pasó de tener 150 a 250 militantes con carnet. Un solo dirigente, Tomás García, promovió el ingreso de los nuevos militantes, procedentes en su mayoría del CDS.

March detalló cómo "se hizo una aproximación a las circunstancias individuales de los nuevos militantes y no todos mostraron su anuencia" al ingreso en el partido. Resaltó que muchos de los nuevos militantes nunca han participado en la actividad partidista de la agrupación y que, actualmente, más de la mitad de los nuevos afiliados de la mencionada localidad no abona sus cuotas.

En las dos agrupaciones de Palma de Mallorca se han detectado igualmente afiliaciones en grupo, propiciadas por presuntos candidatos a la dirección del partido y a la alcaldía. En unas recientes asambleas, dos dirigentes fueron criticados por utilizar estos métodos fechas antes de las elecciones internas del partido. Un miembro de la ejecutiva del PSOE balear explicó que antes de las citas electorales internas siempre se detectan "sospechosos incrementos en la militancia. Entran familiares y amigos que jamás militan, y, en algunos casos, los promotores abonan cuotas pendientes para obtener el voto y la adhesión".