La inmigración masiva genera fascismo, según Estefanía

El director de EL PAÍS, Joaquín Estefanía, aseguró ayer en Almería que una entrada indiscriminada de inmigrantes en aquellos países receptores que no garanticen unas dignas condiciones de vida para el colectivo serían un germen idóneo para la aparición de extremismos políticos. "No se pude promover la entrada, masiva si paralelamente no se solucionan sus condiciones de vida", dijo Estefanía, quien recalcó que la sociedad dual que generaría este fenómeno "es un referente básico de las inestabilidades políticas y el fascismo".El director de EL PAÍS, que participó en el curso organizado por la Universidad Complutense de Madrid en Aguadulce (Almería) sobre La Inmigración en Europa, dirigido por el periodista José Antonio Martínez Soler, expresó el temor de los dirigentes españoles ante una generalización de brotes xenófobos en la sociedad que pudieran ser "articulados a través de alguna formación política", como ha pasado en otros países europeos.

Para prevenir la extensión de actitudes racistas, Joaquín Estefanía abogó por el establecimiento de "unas reglas del juego" que las eviten. Como normas de convivencia enumeró el respeto de los inmigrantes hacia las leyes, escritas o no, que rigen en el país de acogida; la contribución del inmigrante a la creación del estado de bienestar de la sociedad receptora y la asunción de la civilización de dicha sociedad aunque no su cultura. A su vez, el país anfitrión debe respetar la identidad cultural de los inmigrantes. El incumplimiento de estas reglas de conducta derivaría, según Estefanía, en la proliferación de microsociedades que darían lugar a reacciones xenófobas y de rechazo al extranjero.

El director de EL PAÍS se mostró a favor de homogeneizar las condiciones de entrada en los países de la CE "aplicando la legislación más generosa". Estefanía instó al Gobierno español a recurrir "al plus de representatividad que ostenta en Europa" para defender la implantación de una normativa generosa.

El director de EL PAÍS aludió también al conflicto bélico de Bosnia-Herzegovina para precisar que "es la demostración palpable de que Europa, si alguna vez ha sido antirracista, se está olvidando de serlo".

El jueves, el presidente del Instituto del Mundo Árabe en París, Edgard Pisani, afirmó que prevé el estallido de un conflicto bélico en el Mediterráneo si en los próximos años Europa no avanza en la cooperación con las naciones árabes basada en el respeto mutuo.