Los serbios impiden que un convoy entre en un enclave musulmán a recoger heridos

Un convoy compuesto por ocho camiones adaptados como ambulancias y destinado a evacuar a 75 heridos del minúsculo enclave musulmán en Konjevic Polje, en Bosnia oriental, permaneció ayer bloqueado en Mali Zvornik, en la frontera entre Serbia y Bosnia hasta que tuvo que girar en redondo.El comandante de las fuerzas de paz de la ONU (Unprofor) en Bosnia, el general francés Philippe Morillon, obtuvo el visto bueno del comandante serbio, Ratko Mladic, para la evacuación parcial de la población musulmana de los enclaves de Konjevic Polje y Srebrenica. Sin embargo, los soldados serbios que guardan el puente sobre el río Drina, frontera natural entre Bosnia y Serbia, aseguran no haber recibido órdenes de sus superiores para dejar pasar el convoy.

Vojislav Seselj, dirigente ultraconservador serbio, amenazó personalmente con disparar sobre los componentes del convoy bloqueado. Instantes después, un casco azul francés resultó herido por los disparos de un arma automática y fue evacuado hacia Belgrado. Ante la evolución de los acontecimientos, el convoy renunció a seguir su camino y dio media vuelta.

Mientras Borís Yeltsin expresaba en Moscú su apoyo incondicional al plan de paz elaborado por Cyrus Vance y David Owen para la región, fuentes serbias declaraban al general Morillon persona indeseable en Bosnia y afirmaban que la contraofensiva de los musulmanes en Bosnia oriental pone en peligro la ayuda humanitaria.