Un marroquí acusa a un policía de Valencia de romperle un testículo de un rodillazo

Hamid Raaji, un marroquí de 25 años afincado en Valencia, permanece ingresado en el hospital La Fe tras haber sido intervenido quirúrgicamente para extirparle un testículo. Según Raaji, sus lesión es consecuencia del rodillazo, que le propinó en la calle un policía local de Valencia que previamente, le había pedido la documentación. La organización SOS Racismo presentará una denuncia por estos hechos, que considera el mayor "atentado racista" ocurrido en la Comunidad Valenciana. "Nunca pense que me pasaría algo así", declaró ayer Raaji. La Policía Local no tiene constancia oficial de que el marroquí fuera ni siquiera identificado."No estoy en el Tercer Mundo, estoy en España". Estas palabras, que Hamid Raaffl pronunció cuando los policías solicitaron que se identificara, crispó a un agente, que le propinó un rodillazo, según la versión del marroquí. Un portavoz de la Policía Local afirmó ayer: "Porque un señor, tenga razón o no, vaya a la prensa, no se abre una investigación. Sí lo haremos si nos pide datos un juez".

Los hechos se produjeron hacia las 17.30 horas del pasado 1 de marzo. El marroquí, que tiene permiso de traba o en España, acababa de visitar a unos amigos en el barrio de El Carme, en el centro histórico de la ciudad. Se dirigía a un bar para tomar un café cuando fue abordado por un agente. "¡Eh tú!, ven para acá", le ordenó el policía, según cuenta el marroquí. "¿Yo, por qué?", asegura Hamid que respondió.

El agente pidió entonces refuerzos y se presentaron cuatro de sus compañeros. Sólo uno de los agentes le golpeó, mientras el resto le cerraba el paso.

Raaji quedó tendido en el suelo y los policías abandonaron el lugar. El herido, siempre según su versión, llegó como pudo hasta su domicilio, en la avenida del Puerto de Valencia, donde vive con un amigo español, y se tumbó en la cama. Permaneció tres días inmóvil, pero al comprobar que su dolor iba en aumento decidió acudir, el pasado jueves, a la puerta de urgencias de La Fe.

En el hospital le explicaron que su lesión requería una intervención quirúrgica inmediata, con la extirpación de un testículo. El herido autorizó por escrito la operación.