Duro ataque en el Reino Unido contra el filósofo francés Jacques Derrida

Los catedráticos de Cambridge decidirán, el próximo sábado, si conceden o no un doctorado honoris causa al filósofo francés Jacques Derrida. La votación se presenta complicada, porque un grupo de estudiosos de la obra de Derrida ha llegado a la conclusión de que el francés ha producido libros casi incomprensibles, éticamente dudosos cuando se consigue entenderlos, y en general de poco mérito. El grupo de críticos se opone rotundamente a la concesión del doctorado.La oposición a Derrida expuso sus puntos de vista en una carta publicada por el diario londinense The Times el pasado 9 de mayo. Los 19 firmantes, entre Im que se cuentan Ruth Barcan Marcus (Yale), W. van Orman Quine (Harvard), Hans Albert (Manheim) y Lorenzo Peña (Madrid) se definen a sí mismos como "filósofos interesados profesional e intelectualmente por la destacada carrera de Derrida". Según ellos, el pensador francés ha trabajado generalmente en campos ajenos a la filosofía, como la cinematografía y la literatura, "sin lograr niveles aceptables de claridad y rigor".

Parte de la obra de Derrida, dicen, consiste en poco más que, «chistes y juegos de palabras". Aunque no discuten su originalidad, los críticos consideran que el estilo literario de Derrida "desaflía la comprensión". Y, lo que es peor, "cuando se efectúa el esfuerzo de penetrar (en su estilo), resulta claro, para nosotros por lo menos, que allí donde se encuentra una afirmación coherente resulta ser falsa o trivial".

Lo cual, dice la carta, contribuye al "silencioso embarazo" de otros filósofos franceses, para quienes Derrida contribuye "sígnificativamente a la extendida opinión de que la filosofia francesa contemporánea es poco más que un objeto de ridículo". La conclusión está al nivel de los demoledores considerandos, "Un prestigio académico basado en lo que nos parece poco más que semiinteligibles ataques contra los valores de la razón, la verdad y la erudición no es, creemos, suficiente para merecer la concesión de un doctorado honorario en una universidad distinguida". El claustro de Cambridge dirá el sábado la última palabra.