HB dice que existe una "campaña de intoxicación" contra los reclusos

A. I. Herri Batasuna enmarca las declaraciones de Etxabe y Urrutia dentro de una "campaña de intoxicación contra el colectivo de presos de ETA", en la que colaboran los medios de comunicación con el objetivo de "generar imaginarias realidades de división y debilidad tanto en ETA como en HB". Para la formación independentista, la ofensiva de los gobiernos central y vasco "está abocada al más rotundo y estrepitoso fracaso". Este argumento de la intoxicación ha sido esgrimido en anteriores ocasiones por HB.

Hace un año, cuando se dio a conocer una carta de Isidro Etxabe en la que afirmaba que no se identificaba con la estrategia de ETA, a la que calificaba de "locura", HB se manifestó de forma similar. Etxabe se solidarizó con el sector de HB que había tenido dificultades por criticar internamente la línea política que dominaba en la coalición independentista y el radicalismo de la cúpula de ETA.

En verano de 1990, Iñaki Esnaola y Francisco Múgica Garmendia, Artapalo, actual máximo dirigente de ETA, se cruzaron cartas en las que el primero expresaba sus discrepancias con la organización y el segundo tachaba al abogado de "cáncer liquidacionista". Esnaola fue también destituido de sus cargos en la Mesa Nacional de HB.

Paralelamente a la destitución de Esnaola se produjo el relevo en Francia de la abogada Christiane Fando, encargada de la defensa de los etarras arrestados en ese país.