El Vaticano espera incorporarse a las negociaciones de paz

El Vaticano quiere tener una presencia en la conferencia de Madrid para influir en los tres asuntos que le interesan: la situación de los cristianos en Líbano, la solución al problema de los palestinos, entre los que también hay una minoría importante de católicos, y el estatuto de Jerusalén, ciudad santa para tres grandes religiones. Pero Israel se opone a esa participación, en primer lugar con el argumento formal de que el Vaticano es el único Estado de Europa que todavía no lo reconoce.Los deseos de la Iglesia fueron expuestos el pasado 7 de marzo por el de hecho ministro de Asuntos Exteriores vaticano, Jean-Louis Tauran, cuando declaró: "Sería impensable que la Santa Sede no participase en estas negociaciones. Obviamente, no como un Estado en paridad con los otros. Habría que encontrar, como se ha hecho en otros foros, una fórmula para que la Santa Sede pueda estar presente sin perder su especificidad".

Con posterioridad a esa fecha, el secretario de Estado, Angelo Sodano, reiteró en una entrevista que el Vaticano no reconocerá al Estado de Israel mientras no se resuelva el problema palestino y no se acuerde un cierto estatuto internacional para Jerusalén que permita una misma libertad de acceso a los santos lugares para judíos, católicos y musulmanes.

Durante su reciente viaje a Brasil, Juan Pablo II declaró a los periodistas: "Muchas veces he dicho que para nosotros sería muy deseable establecer estas relaciones [con Israel]. Pero antes se tienen que resolver algunos problemas sobre los que incluso el presidente norteamericano ha dicho: 'Nosotros estamos siempredispuestos, pero nuestros interlocutores deberían hacernos las cosas un poco más fáciles".