La prensa marroquí informa cuatro días después del viaje de Basri a Ceuta

La prensa marroquí ha informado de la estancia del ministro del Interior, Dris Basí, a Ceuta con cuatro días de retraso. La noticia se publicó ayer en el periódico Ittihad Ictiraki, portavoz en lengua árabe de la Unión Socialista de las Fuerzas Populares, mientras que el Partido Nacionalista, el Istiqlal, no se da por enterado de la cuestión y un portavoz oficioso de la organización asegura que no se puede hacer ningún comentario, ya que se trata de "un viaje fantasma".

El periódico socialista titula la información con las proféticas palabras que el ministro del Interior y de Información marroquí, Dris Basri, pronunció en la conferencia de prensa celebrada en el céntrico hotel La Muralla, en Ceuta, en las que aseguró: "Si la visita provoca una tempestad, ya la resolveremos".

Nota poco destacada

La nota informativa del periódico socialista, redactada a partir del testimonio contrastado de los corresponsales españoles desplazados al lugar, ha sido publicada en un lugar poco destacado, en las páginas del interior. Recalca la información que a la visita se le ha dado "gran importancia en España" y tiene especial cuidado de acompañar el nombre de la ciudad, Ceuta, con el calificativo de villa "ocupada".Con esta información, Ittihad Ichtiraki y con el artículo de opinión publicado el martes, el portavoz socialista parece haber dado por cerrada la polémica, entre otras razones porque la nota oficial informativa salida del Gabinete de Prensa del Ministerio del Interior marroquí, referida a este viaje, no puede inducir a errores y explica con claridad que el ministro Dris Basri se desplazó sólo hasta el puesto fronterizo, donde se reunió con la prensa.

Esta versión ha sido recogida con fidelidad y disciplina por todos los medios informativos, con excepción del periódico socialista.

[La visita del ministro de Interior marroquí a Ceuta, a quien acompañó su colega de Inmigración, Rafek Haddaui, "no implicó ningún cambio en la posición reivindicativa alauí sobre la ciudad", según manifestó ayer a la agencia Efe un portavoz oficial en Rabat, que sin embargo consideró "normales" los ataques de la oposición socialista marroquí al viaje. "La visita no tuvo carácter político y no hay que darle otro significado que el de un gesto de amistad entre dos países que acaban de firmar un tratado en ese sentido", agregó el citado portavoz.]