Informática y plantilla, puntos prioritarios del protocolo de fusión de BCHA

La integración informática y el acoplamiento de las respectivas plantillas son los dos puntos prioritarios del documento de fusión entre el Banco Central y el Banco Hispano Americano, que ayer terminó de redactar la comisión de seguimiento de la fusión de ambos bancos. Este documento será sometido a la aprobación de los respectivos consejos los próximos días 26 y 27. Las juntas extraordinarias que aprobarán definitivamente la fusión se convocarán en septiembre.

La comisión de seguimiento de la fusión, integrada por Epifanio Ridruejo, Luis Blázquez y Antonio Escámez Torres por parte del Central y José María Amusátegui, Fernando Asúa, Santiago Foncillas y Francisco Zamora por el Hispano, elevará este documento, una vez aprobado por los consejos, al Banco de España y al Ministerio de Economía, que debe conceder las exenciones fiscales solicitadas para los 250.000 millones de pesetas de plusvalías que van a aflorar por la fusión.En cuanto a la integación de los sistemas informáticos, fuentes de ambos bancos han señalado que el hecho de que ambos pertenezcan al sistema 4B facilita en parte su integración, aunque reconocen que se deberá trabajar duro en este campo. En cuanto a las plantillas, esas fuentes reconocen que en el documento no se precisa su dimensión futura, aunque se recalca. que se puede dar cabida a todos los actuales empleados.

El posible nombramiento futuro del consejero delegado del nuevo banco aún no se ha abordado por parte de los presidentes de ambas entidades. En el protocolo de fusión se señala que Arthur Andersen será la entidad que efectúe las valoraciones generales de los bancos. Además, el Registro Mercantil ha designado como entidad técnica independiente a Price Waterhouse. La firma American Appraisal se hará cargo de las valoraciones inmobiliarias. También se ha acordado en la reunión de ayer enviar un folleto informativo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores para que las acciones del nuevo banco coticen automáticamente en Bolsa y no sufra quebranto la liquidez de los títulos.