Repulsa en Argentina por la liberación de los dictadores

La liberación en la madrugada de ayer de los líderes militares de la dictadura de 1975 a 1983, y responsables de la guerra sucia que ocasionó la muerte de más de 30.000 personas, ha provocado una repulsa general de las fuerzas políticas de oposición y de las organizaciones defensoras de los derechos humanos en Argentina. Mientras, en Grecia, el Gobierno conservador de Constantino Mitsotakis ha renunciado a conceder el perdón a los militares que impusieron la dictadura de 1967 a 1974.

En las principales ciudades de Argentina se desarrollaron ayer manifestaciones de protesta. En Buenos Aires se congregaron unas 90.000 personas. El presidente Carlos Menem, que ha calificado los indultos de "última contribución" a la pacificación nacional, ha eludido dar explicaciones a la opinión pública, mientras en la tarde de ayer se celebraba una concentración masiva de repulsa, en la plaza de Mayo, ante la Casa Rosada, la residencia oficial del jefe del Estado. Los organizadores de las protestas pidieron a los manifestantes que se colocasen crespones negros.Los medios de comunicación argentinos recogieron ayer decenas de declaraciones contra la decisión de Menem. El ex presidente Raúl Alfonsín manifestó: "Es el día más triste de mi vida". El fiscal del proceso a las tres primeras juntas de la dictadura, Julio Strassera, renunció a su cargo de embajador ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. Los seis decretos de indulto fueron firmados por el presidente Menem y el ministro de Educación y justicia, Hugo Salonia. El primero perdona lo que les resta de cárcel a los dictadores militares, y el segundo, sólo a Mario Firmenich, cabecilla de la guerrilla peronista Montoneros. Siguen los dos que suprimen los procesos legales contra los militantes de la ultraderecha Norma Kennedy y Duilio Brunello. Los dos militantes están dirigidos particularmente al ex ministro de Economía de la dictadura José Alfredo Martínez de Hoz y al ex comandante del Primer Cuerpo del Ejércirto de Tierra Carlos Suárez Mason.

Páginas 2 y 7