Stoichkov resolvió el 'derby' catalán'

La Liga arrancó con un derby pasional que sentenció Hristo Stoichkov, el protagonista más fogoso de la contienda. La confrontación resultó pletórica en cuanto a entrega y relevante respecto a la nueva filosofía de Johan Cruyff. El Barcelona trabajó a destajo de medio campo hacia el área contraria para abrirse paso en el marcador y, luego, cuando lo consiguió, realizó una defensa a ultranza de su victoria. El técnico azulgrana acabó sustituyendo delanteros (Laudrup y Stoichkov) por zagueros (López Rekarte y Alexanco) para salvar el resultado. Cruyff ha decidido en su tercer año como entrenador del Camp Nou que vale la pena poner una red debajo del trapecio.El Barcelona es un equipo nuevo, con cuerpo, y, sobre todo, más serio que el año pasado. Los resultados acompañan (no ha perdido un sólo partido desde que inició la pretemporada) y, mientras, la excentricidad ha dado paso a la sensatez. El pragmatismo ha arrinconado a la anarquía y se impone un sistema polivalente en el que importa tanto la defensa como el ataque.

El Español sólo dispuso ayer de tres remates francos: Orejuela (m. 45), Gabino (m. 40) y Gay (m. 90). El equipo blanquiazul dispone de todo un tratado futbolístico (Luis). Es un equipo muy armado, fajador por excelencia, dificil de batir, pero que ayer evidenció una falta de poder ofensivo alarmante.

El Barcelona estuvo pletórico en la primera fase. El Español se fue cayendo a trozos. Retirados los dos extranjeros por lesiones musculares (Sirakov y Wutte), los blanquiazules perdieron la compostura. Los azulgranas, pacientes durante media hora en el manejo del balón en la zona media, ridiculizaron la defensa en línea de los locales. Las penetraciones por la banda derecha de Goikoetxea. y los pases al hueco de, los centrocampistas dejaron a Stoichkov tres veces seguidas en un mano a mano con Biurrun (m. 25, 37 y 38). Los reflejos del portero vasco se impusieron a la habilidad del delantero búlgaro. El guardameta, protegido por el larguero (Amor estrelló un balón en la madera en la medía hora), mantuvo a su equipo a flote hasta que Stoichov acertó con el estoque en el último remate azulgrana antes del descanso.

El resultado fue mezquino con el Barcelona. El balón corrió mansamente por las piernas de los azulgranas, de pie a pie y de punta a punta del campo, salvando las correrías de los blanquiazules, que no encontraron a quien presionar. El Español fió todo su juego ofensivo a los balones parados y a los errores del rival (Serna cometió un penalti a Gay al cuarto de hora).

Todo el segundo periodo estuvo presidido por la presión del Español y la especulación del Barcelona. Pero, al menos, el equipo azulgrana parece más competitivo que los anteriores. Ayer ganó donde debe hacerlo un aspirante a conquistar el título de Liga.