Lazaroni, satisfecho del rendimiento de Brasil

"Abran bien sus oídos: estoy muy satisfecho de mi equipo, que ha ganado cuatro puntos en dos partidos". Así de contundente fue Sebastiáo Lazaroni, seleccionador de Brasil, en su enésima defensa tras los ataques de que ha sido objeto al decidir incluir a un libero en su equipo, críticas a las que también se unieron algunos de sus jugadores. La selección brasileña concluye esta noche la primera fase del Mundial, ante Escocia (TVE, nueve de la noche), en Turín.

Lazaroni ha sido insultado, vilipendiado, objeto de mofa y escarnio, pero sigue creyendo en sus ideas. "No renunciaré nunca al libero", dice. "Salvo en caso de emergencia, no recurriré nunca a los tres delanteros". Lazaroni sigue firme en sus criterios, pero ante Escocia ha bajado un poco la guardia. Ha aceptado las críticas, aunque sólo en un apartado: la delantera. El sacrificado será Muller. Su compañero de ataque, Careca, se ha quejado: "Con Muller estaba comodísimo. No entiendo el cambio". Lazaroni ha preferido a Romario, el delantero del PSV Eindhoven, que se ha recuperado ya de una lesión que le apartó cuatro meses del fútbol, y ése será el único cambio, junto a la obligada entrada de Ricardo Rocha en la defensa, sustituyendo al sancionado Mozer.

Brasil se juega hoy la primera plaza del grupo C. Tiene toda la ventaja a su favor, pero si Escocia vence por uno o más goles de diferencia, pasaría a Brasil en la clasificación y se enfrentaría a Argentina en los octavos de final.

Escocia mantendrá el mismo equipo que le llevó a ganar a Suecia. Los escoceses están eufóricos tras una victoria que palió el desastroso inicio ante Costa Rica. Roxburgh, su seleccionador, ha anunciado que jugará a la defensiva, en busca del empate y a la espera de que Suecia venza a Costa Rica. Escocia, de esa forma, sumará tres puntos y se clasificará en la segunda plaza del grupo, para jugar en octavos ante el ganador del grupo A.