Escasa variación en Wall Street, a pesar de la inflación

El índice de precios al por mayor norteamericano aumentó, durante el mes de enero, un 1,1%, lo que supone el mayor incremento en los últimos 15 años. Sin embargo, la tasa de inflación subyacente creció tan sólo un 0,1%. Es decir, que el alza de los precios quedó concentrada en los sectores de energía y alimentación, los cuales, a su vez, se vieron negativamente afectados por las bajas temperaturas registradas en enero. Como consecuencia, los inversores no reaccionaron tras interpretar que los datos tenían carácter coyuntural y, por tanto, los mercados financieros no acusaron presiones vendedoras.

Las cotizaciones bursátiles en Wall Street cerraron incluso con una ligera mejora, concretamente de 3,83 puntos, lo que sitúa al índice Dow Jones en el 2.648,20. La sesión transcurrió con escasas variaciones en los precios y un volumen de contratación moderado. Por su parte, los mercados de bonos del Tesoro se situaban al alza, reflejando los relativamente buenos resultados del último tramo de la refinanciación trimestral llevada a cabo por el Tesoro. La finalización de las subastas resultó en alzas generalizadas de las cotizaciones.

En los mercados de divisas, la cotización del dólar se mantuvo dentro de una estrecha banda de fluctuación, en torno a los niveles del cierre del día anterior, es decir, 1,6750 marcos. En opinión de los operadores, las incertidumbres que rodean al posible proceso de reunificación de las dos Alemanias continuó ejerciendo una influencia negativa en la cotización del marco y en los mercados de renta fija germano occidentales. Por otro lado, tras la euforia alcista de las primeras sesiones de esta semana, la bolsa de Frankfurt sufrió el viernes realizaciones de beneficios. El índice DAX cedió 30 puntos, o lo que es lo mismo un 1,5%, para cerrar en 1885.