El ex líder de Kosovo acusa directamente al dirigente serbio Slobodan Milosevic

MIRJANA TOMIC, ENVIADA ESPECIAL

Azem VIasi, ex dirigente comunista de la provincia yugoslava de Kosovo, procesado por "actividades contrarrevolucionarias", acusó ayer a Slobodan Milosevic de haber ordenado su encarcelamiento el 1 de marzo de 1989. La orden fue ejecutada posteriormente por Rahman Morina, entonces jefe de policía de Kosovo y actual líder comunista de la región. VIasi negó prácticamente todos los cargos que le habían sido imputados durante la sesión matutina del proceso de ayer, celebrado en Titova Mitrovica (Kosovo).

"Actitudes políticas no pueden servir de base para los cargos criminales", dijo Vlasi, y añadió que había entrado en conflicto con una política (se refería a la serbia) que califica de contrarrevolucionarios a todos aquellos que no comparten su punto de vista. VIasi afirmó asimismo que se le juzgaba por su orientación yugoslava y su antinacionalismo, pues "no siento la necesidad de demostrar que no soy un enemigo del país".

Durante más de dos horas, el ex dirigente comunista repitió una y otra vez que no era nacionalista o contrarrevolucion ario, imputaciones que se le inculpan, pero, a pesar de haber reiterado que se trataba de un proceso político, VIasi hablaba como un comunista, hombre del sistema, que fue injustamente condenado. De hecho, lo absurdo del más importante proceso político a un alto funcionario en Yugoslavia desde los años cincuenta, y tal vez el último en la Europa oriental cambiante, se ejerce contra un hombre que jamás ha cuestionado el sistema.

El predilecto de Tito

Uno de los 10 hijos de una familia campesina albanesa, VIasi ha sido el prototipo del hombre con un gran potencial político. Selfmademan en la educación y en la política, VIasi fue durante los años setenta el presidente de la Organización de la Juventud Yugoslava y desde aquel entonces se le conocía como "el joven predilecto de Tito". Cuando en 1981 estallaron los primeros conflictos interétnicos nacionalistas en Kosovo, VIasi fue trasladado a Pristina para ejecutar los encargos del partido y luchar contra el nacionalismo albanés. Algunos afirman que fue el primero en utilizar el término contrarrevolucionario al describir las actividades de los nacionalistas albaneses. En aquel período su popularidad entre los albaneses fue mínima: le llamaban el "perro serbio". Sin embargo, entrando en conflicto con Slobodan Milosevic y su equipo, VIasi se convirtió en el héroe nacional albanés, y ayer preguntó: "¿Cuándo ha comenzado la contrarrevolución en Kosovo?".

Su proceso, interrumpido ya dos veces para diluir el interés de la opinión pública, dividida sobre la necesidad del proceso, será, según los abogados, largo. Dos de los ocho miembros de la presidencia colectiva yugoslava -el esloveno Janez Drnovsek y el croata Stipe Suvar- están a favor de la abolición.