La enfermera muerta por SIDA no creía haberse pinchado, según un informe

Dulcenombre Gómez Torres, ATS fallecida en Córdoba como consecuencia del SIDA, no recordó durante su tratamiento "haberse pinchado con agujas de enfermos". Así aparece especificado en el informe enviado a la Comisión Nacional del Síndrome de Inmuriodeficiencia Adquirida suscrito por el médico Rafael Jurado Giménez, adscrito a la unidad de infecciosos del hospital Provincial de Córdoba. Este informe tiene fecha de 26 de julio, 11 días después de la muerte de la enfermera, y forma parte del historial clínico hecho a la ATS desde que se le detectara la inmodeficiencia humana a finales de junio pasado. Rafael Jurado explicó que el informe se realizó al conocerse los últimos datos, resultados y pruebas que se habían realizado a la enfermera. Jurado rehusó hacer comentarios sobre el posible mecanismo de contagio del virus VIH de Dulcenombre Gómez. "Sólo informaré", dijo, "a sus familiares más directos o al juez pero no daré información pública".

En el informe, resumen de todo el historial clínico de la fallecida, Jurado señala, en el apartado de factores sociales y de riesgo, que Dulcenombre tuvo como probable exposición al virus del SIDA el ser profesional sanitario, pero especifica que la ATS "no recuerda haberse pinchado con aguias de enfermos" durante su labor profesional. Asimismo, que 1,9 enfermera no utilizó agujas para inyección intravenosa de drogas no prescritas, que no recibió hemoderivados por trastornos de coagulación ni transfusiones sanguíneas, así como que no mantuvo relaciones homosexuales o bisexuales.