Problemas con la interpretación

Las partidas vendedoras han continuado dominando la situación en las bolsas ante el escaso impacto que están teniendo unas noticias con una lectura positiva muy voluntariosa. El déficit comercial norteamericano no resultó todo lo poco malo que se esperaba, mientras que el IPC propio fue bajo, pero no lo suficiente, y viene a añadirle peso a una tasa interanual alta, con lo que los inversores que mantienen posiciones en el mercado no tienen más remedio que interpretar a su manera estos datos. El volumen negociado en la sesión fue bastante bajo, y hay que tener en cuenta que ya en la jornada anterior quedó por debajo de los 12.000 millones de pesetas efectivas.El ambiente estuvo dominado por los comentarios y evaluaciones sobre los resultados electorales y algunas caídas importantes que ponían la nota gris en un panorama aparentemente tranquilo. Las caídas se repartieron por todos los corros, con muy pocos valores manteniendo las expectativas particulares a corto o medio plazo.

Los valores bancarios tampoco hicieron cambiar nada, y tuvo que ser el IPC el que animara a algunos especuladores a arriesgar pequeñas compras que consiguieron animar algo el cierre. Incluso el mercado continuo recibió estos tanteos compradores, lo que indica que los inversores empiezan a usar todos los instrumentos a su alcance cuando la ocasión es propicia.

Las posiciones al cierre cambiaron el tono de la sesión, pero las compras eran escasas y hay que someterlas a un prudencial período de duda.