Debate sobre la reforma institucional

Tan sólo cuatro años después de la aprobación del Acta Unica, la primera modificación del Tratado de Roma, y menos de dos años después de su entrada en vigor, los doce reanudaron ayer el debate sobre una posible reforma institucional a la que el Parlamento Europeo pidió estar asociado por boca de su presidente, el británico lord Henry Plumb.

Por iniciativa de la presidencia española, Plumb acudió a la reunión ministerial de carácter informal que se celebra en Granada para pedir a última hora de la tarde que el Consejo Europeo de junio en Madrid, o el de diciembre de Estrasburgo, encarguen al Parlamento la elaboración de propuestas de reforma institucional que serán necesarias cuando haya sido creado el mercado único y se vislumbre la unión europea.

La petición de Plumb está en coincidencia con la tesis del presidente Felipe González, que el pasado miércoles declaró ante el Parlamento que la aplicación del Acta Unica hasta sus últimas consecuencias tendrá importantes repercusiones institucionales".

"Me parece útil y necesario que el próximo Parlamento Europeo que salga de las urnas lleve a cabo, con las demás instituciones, la reflexión y el debate necesario para adaptar la Comunidad a las exigencias del siglo XXV, y a renglón seguido sugirió que se convoque una conferencia institucional con la participación del Parlamento, el Consejo de Ministros y la Comisión.

Además de Plumb, González había sugerido que el eurodiputado socialcristiano belga Fernand Herman también se desplazase a Granada para dar cuenta de su informe, aprobado en febrero por el Parlamento, sobre los pasos a dar para preparar, mas allá del mercado único de 1993, la unión europea. Pero Herman no acudió a la cita y Plumb apenas se refirió a su informe, lo que decepcionó a algunos de sus oyentes, empezando por el presidente Jacques Delors.