La regla del placer

¿Cuánto valor tiene un paseo en una gloriosa mañana de primavera? ¿Y jugar con tu hijo recién nacido? Las mejores cosas de la vida son gratis, o, de otra forma, tienen un valor incalculable. No son de la misma opinión Stanley V. Smith y Dougias Rallo, un equipo de abogados de Chicago que ha encontrado la forma de poner un precio, en dólares, a la felicidad. Lo llaman el valor hedónico. Ellos están usando este concepto para ganar una gran cantidad de dinero en indemnizaciones para sus clientes.Lo que estos dos abogados defienden está en la línea de una corriente de pensamiento que recorre Estados Unidos: las víctimas de accidentes deben ser compensadas por su pérdida de placer además de por su dolor y sufrimiento. Llegando hasta el final del razonamíento, el abogado Smith ha construido una fórmula matemática para calcular los daños hedónicos sufridos por una persona basándose en unos datos que pretenden ser objetivos.

La idea tia generado un enorme interés, incluso entre quienes la encuentran profundamente peligrosa. Los críticos consideran que ya ahora se paga a las víctimas una indemnización de dolor y sufrimiento que incluye la pérdida de placer. En todo caso, las cosas no están nada claras al respecto. Las indemnizaciones por pérdida de placer puede que sirvan para pagar aquel paseo primaveral, pero desde luego van a ayudar a coristruir residencias de vacaciones a abogados avispados.

26 de febrero