14 personas permanecen hospitalizadas en estado grave

El doctor Luis Delgado Cabezas, médico de la clínica de La Luz y padre del niño muerto en el atentado se encuentra internado en el hospital Clínico de San Carlos. Delgado sufrió herida perforante en el ojo derecho y ayer estaba consciente. A última hora de la tarde aún no se le había comunicado la muerte de su hijo. Aunque su evolución es positiva, los facultativos que le atienden consideran que deberá permanecer en observación durante 48 horas, al haber sufrido un traumatismo craneoencefálico y para evitar posibles complicaciones.También en el Clínico se hallaban hospitalizados a última hora de ayer José Ignacio Sarmiento, que sufrió diversos traumatismos al ser atropellado en el lugar del atentado por un coche patrulla de la policía, y Germán Peso Peña, con heridas de metralla en ambos ojos. María Luisa Menéndez Ceño, que sufría fractura en la mano derecha, fue dada de alta en la tarde de ayer.

En el hospital de la Cruz Roja se hallaba Mercedes Villalonga Villalonga, madre del niño muerto, que trabaja como enfermera en la misma clínica que su esposo y está embarazada de tres meses. Esta mujer sufrió una herida perforante en cráneo, con entrada de metralla por el occipital derecho, que cruza la línea media y alcanza la tabla interna del lado opuesto.

Mercedes Villalonga tenía alojados en el cerebro numerosos fragmentos óseos y metálicos y fue intervenida quirúrgicamente Ayer se encontraba en "coma de grado uno", según el parte médico. Su embarazo evoluciona normalmente, según la exploración fetal a que ha sido sometida.

En el mismo hospital de la Cruz Roja quedaron internados por la gravedad de sus heridas las siguientes personas: Alfredo Acebes Muñoz, Alfonso Caballero de la Iglesia, José Javier Martínez Pérez, Juan Munárriz Vigoria, Ramón Santiago Pino y Ana Vergas García.

Ayer seguían hospitalizados cuatro de los 15 guardias que sufrieron heridas de cierta consideración: Nicanor Hidalgo, Ricardo Antúnez Rodríguez, Andrés Cortés Ramírez y José Martos Suárez.

El director del hospital clínico de San Carlos reconoció ayer que muchas personas se ofrecieron voluntariamente para donar sangre nada más conocer el atentado terrorista.