El dinero apuesta por el 300%

El ambiente ha mejorado sensiblemente en los mercados de valores en esta jornada de cierre, ante la insistencia de un dinero que se ha impuesto a las tradicionales realizaciones de beneficios. Esta pérdida de prejuicios por parte de los compradores responde exclusivamente a la prolongada ausencia de papel que padecen la mayoría de los corros. Este juego de ausencias -primero el dinero y ahora el papel- ha servido para consolidar el nivel de las cotizaciones y ofrecer, de paso, ciertas garantías a los compradores. La llegada de algunas partidas compradoras procedentes de fuera de las fronteras han terminado de animar la barandilla, hasta ahora el único dinero dispuesto a aceptar la altura en que se mueven las cotizaciones.La inminencia del 300% apenas ha producido abandonos, al margen de los habituales de la operativa semanal, lo que ha animado a la inversión a corto a permanecer en sus posiciones a la espera del asalto definitivo a esa cota. La confianza de estos inversores viene dada por esa presencia de partidas compradoras cuya cuantía no encuentra contrapartida y que seguían buscando papel a la hora del cierre.

Muchas de estas partidas deben su existencia a la proximidad del nivel del 300%, esto es, tienen un claro componente chartista, lo que las sitúa dentro de la esfera del corto plazo. En cuanto a la sesión, la apertura de las eléctricas ya fue animada como para permitir planteamientos más agresivos en los sectores industriales. Aun así, no todos estos grupos participaron de la presencia de dinero, lo que avala la teoría de la selectividad y de la consolidación de precios, antes que de un simple calentamiento veraniego.