Hungría opta por una reforma económica radical

El pleno del Comité Central del Partido Socialista Obrero de Hungría (PSOH, comunista) adoptó ayer, casi por unanimidad, la reforma de la política económica para los próximos años, decantándose por la opción más radical -amplia reestructuración de empresas y aumento del paro- frente a otra alternativa que preconizaba cambios a pequeños pasos. El informe, presentado por Miklos Nemeth, miembro del Politburó y del Secretariado del PSOH, fue aprobado con tres votos negativos y una abstención, de un total de 110 miembros con derecho a emitir su sufragio.En su discurso de clausura, Nemeth hizo hincapié en el problema de los créditos internacionales, los cuales, dijo, son necesarios para realizar los proyectos económicos del país. "Debemos conseguir esos medios" (finanzas internacionales), aseguró el dirigente húngaro.

El pasado miércoles, cuando presentó la opción económica más radical, Nemeth afirmó que "esta alternativa abriría el país a las leyes del mercado" y ofrecería "mayores oportunidades, lo que entraña, al mismo tiempo, un riesgo mayor". En opinión del órgano oficial del partido comunista, Nepszabasag, la aplicación de esta nueva política implicará el desempleo de 80.000 a 100.000 personas. El segundo plan, más moderado, preveía el restablecimiento de la balanza comercial, con un paro entre 30.000 y 50.000 personas, según el mismo díario. Al enjuiciar esta segunda opción, Nemeth aseguró que "aplicar este modelo sería retardar las soluciones, con todo lo que eso implica de desventaja".