El vencedor ofrece un programa de concertación

, El presidente electo de Ecuador, Rodrigo Borja, ofreció el domingo, tras conocer su victoria, un programa de concertación para sacar al país de la crisis y aseguró que su Gobierno no tiene planes para estatizar ni privatizar empresas.

Borja se presentó con tono mesurado, como ha sido el estilo de su carrera política. A la tercera fue la vencida y consiguió ganar la elección presidencial. En 1978, Borja quedó en cuarta posición en la primera vuelta. Hace cuatro años, ganó la primera vuelta, pero perdió en la segunda por 82.000 votos frente al actual presidente, el socialcristiano León Febres Cordero. Con su estilo brutal, Febres machacó a Borja en el debate de televisión de final de campaña. El tono mesurado de Borja no sirvió ante las acometidas de Febres.

Esta vez Borja no incurrió en el mismo error. Aunque el 31 de enero Borja había aceptado un debate con Bucaram, después dio marcha atrás para no afrontar la violencia verbal del populista de Guayaquil. Borja trató de mantener el tono mesurado de la campaña, pero sin dejar de recurrir a golpes bajos, como la insistencia en el origen no ecautoriano de Bucaram, por su ascendencia árabe, y la difusión de pasquines con definiones clínicas de la paranoia, destinadas a describir la personalidad del candidato populista, que acusaba a Borja de borracho y ateo.