Papandreu y Ozal profundizan en el 'espíritu de Davos'

Andreas Papandreu y Turgut Ozal, primeros ministros de Grecia y Turquía, respectivamente, profundizaron ayer en Bruselas en el llamado espíritu de Davos, al reunirse, por segunda vez en poco más de un mes, dentro de un proceso de distensión entre los dos países, miembros ambos de la OTAN, que estuvieron al borde del enfrentanúento bélico la pasada primavera.Ambos dirigentes celebraron ayer una entrevista de dos horas y anunciaron que se reunirán nuevamente hoy, tras lo cuál harán público un comunicado.

El primer encuentro entre ambos, a finales de enero en Davos (Suiza), cambió la atmósfera en las relaciones entre los dos países, enfrentados por varios contenciosos, especialmente por la disputa de la soberanía en el mar Egeo, y el conflicto de Chipre, isla partida en dos desde la invasión turca de 1974.

Papandreu fue el primero en llegar al palacio Egmont, un edificio del Ministerio belga de Asuntos Exteriores situado en las próximidades de Bruselas.

Fuentes griegas aseguraron ayer que esperaban que las conversaciones lograran progresos en cuestiones humanitarias, como la devolución de las propiedades griegas confiscadas por Turquía o la suerte de unos 1.600 desaparecidos durante la intervención militar turca en Chipre.

Aunque las diferencias entre ambos países subsisten, la nueva política de no guerra (como la definen los dirigentes de Atenas) compromete a Grecia y Turquía a impedir que sus diferencias puedan conducirles al enfrentamiento bélico.

En las últimas semanas, los contactos entre políticos y personalidades privadas de ambos países se han multiplicado. Para el próximo mes de junio, está previsto que Ozal visite oficialmente la capital griega, en el marco de las visitas regulares acordadas en Davos.

Durante años, los Gobiernos de Grecia consideraron que la amenaza venía del Este (de Turquía), y no del Norte (de.la Unión Soviética). El contencioso afectó al flanco suroriental de la organización y a las relaciones de Atenas con EE UU.