Un guardián del Pentágono mata a un intruso que esgrimió una pistola

Un guardián del Departamento de Defensa norteamericano mató ayer de un disparo a un intruso que esgrimió una pistola, pidió discutir sobre la política de desarme, y pasó violentamente por un puesto de seguridad, según informaron funcionarios del Pentágono.El individuo, cuya identidad no había sido facilitada aún ayer por la noche, fue trasladado al cercano hospital Ortopédico Nacional de Washington inmediatamente después del incidente, que ocurrió a las dos de la tarde (hora peninsular), y murió dos horas y media más tarde como consecuencia de una herida de bala en la espalda.

Según fuentes del Pentágono, el hombre se acercó a los guardianes y pidió que se le permitiera la entrada al edificio. Cuando se le negó ésta, esgrimió una pistola de pequeño calibre y se precipitó al interior, en dirección a las oficinas del Centro de Mando Militar Nacional y de la Junta de Jefes de Estado Mayor, situadas en las proximidades.

Una primera versión indicaba que el individuo resultó alcanzado por una bala cuando uno de los militares del servicio de seguridad se vio amenazado y disparó dos tiros. Sin embargo, fuentes del hospital al que fue trasladado el afectado indicaron que el intruso presentaba una herida de bala, con orificio de entrada en la espalda y de salida por el pecho.

Según funcionarios del Pentágono, es el primer incidente de este tipo. No obstante, el edificio del Departamento de Defensa ha sido en el pasado el objetivo de numerosas manifestaciones antibélicas. El Buró Federal de Investigación norteamericano (FBI) y el Servicio de Protección Federal, del que depende la seguridad del Pentágono, comenzaron de inmediato una investigación sobre el incidente.