Un unificador para Chile

El general Pinochet gobierna en Chile tanto por omisión como por la fuerza. Está rodeado de opositores a su régimen, pero éstos,al contrario de los que sustituyeron a los dictadores de Argentina y Filipinas, deben llegar a convertirse en una oposición política viable.Más que la valentía para hablar esta oposición necesita la sagacidad para superar la división y establecer un nuevo y pragmático consenso. Quizás ayude el viaje del papa Juan Pablo II. A pesar de haber insistido en que su misión era pastoral, ha agrupado un coro de críticas que denunciaban las atrocidades cometida por el régimen de Pinochet. Él, al igual que la Iglesia católica de Chile, la Embajada de Estados Unidos y una serie de partidos políticos chilenos, expresó su esperanza etí una pronta transición a la democracia y pidieron con urgencia vías de paz y reconciliación.

Desde 1973 el general Pinochet ha dominado Chile porque ha sido capaz de aprovecharse de ¡as divisiones que debilitan a las fuerzas opositoras. Chile puede tener su Fedinánd Marcos, quizás incluso su cardenal Jaime Sin, pero ¿quién será su Corazón Aquino? Por ahora son los demócrata-cristianos los que, junto con algunos partidos de izquierda, dominan las. fuerzas antiPinochet. Sus antagonismos ayudaron a Pinochet a llegar al poder y pueden muy bien hacer que siga en él hasta qu¿ surja alguien con un.programa político práctico y de principios.

, 6 de abril