El suelo más caro de toda la ciudad

El inventarlo de cementerios realizado entre: 1985 y 1986 por la Dirección General de Medio Ambiente (le la Consejería de Ordenación Territorial señala que los costos de los enterramientos se han disparado en los últimos años. El precio de una sepultura normal alcanza las 60.000 pesetas, y si se trata de una sepultura perpetua, las tarifas se sitúan entre las 236.000 y las 28 1.000 pesetas. En el cementerio de la Almudena, en Madrid, un nicho alcanza las 30.000 pesetas y el precio del suelo para la construcción de panteones asciende, según datos del Ayuntamiento, a 288.000 pesetas por metro cuadrado, mucho más caro que el precio de la vivienda más lujosa.El inventario arrojaba otras conclusiones preocupantes: los cementerios municipales están colmados, sobre todo en las zonas sur y noroeste de la región.

En el territorio regional existen 253 camposantos, de los que la cuarta parte pertenece a la Iglesia. Del total habría que clausurar, a corto plazo, 28, ampliar otros 20 y construir 12 nuevos.

Laliniciativa privada se ha decantado por los modernos cementerios-parques ya existerites en otros países. Camposantos de gran extensión, cubiertos de césped, con espacios amplios y bien cuidados, adornados con fuerites y surcados por caminos bordeados de árboles, que les confieren una Fisonomía suave y apacible, sin la abundancia de elementos ornamentales nerarios que caracteriza el aspecto, a veces un poco tétrico, de los cementerios tradicionales.

Las buenas perspectivas económicas han hecho que en el plazo de un par de años la Comunidad haya recibido solicitudes para la construcción de cementerios privados en al menos seis municipios de la región: Alcobendas, Algete, Villaviciosa de Odón, Pinto, Velilla de San Antonio y Rivas Vaciamadrid. En el resto del país existen también proyectos para la construcción de cementerios, y la Impresión generalizada es que "se trata de un buen negocio".

Fuentes de la citada consejería señalaron que son las perspectivas de realizar buenos beneficios económicos lo que ha atraído el interés del capital privado a un sector que en España ha estadoslempre gestionado por el sector público y, en concreto, por los ayuntamientos: "Se da el caso de que los terrenos para la construcción de camposantos tienen que estar fuera de los cascos urbanos, es decir, son siempre terrenos rústicos, de bajo precio. El propio cementerio no tiene excesivos gastos de conservación y mantenimiento, mientras que el precio de las sepulturas es muy alto. Los beneficios serían de miles de millones. Estimamos que los enterramientos son un servicio público, y si prestar ese servicio origina beneficios, deben ir a las arcas públicas".