Apoyo a la dirección del PNV de Guipúzcoa en vísperas de la asamblea decisoria

Las juntas municipales del Partido Nacionalista Vasco (PNV) de Guipúzcoa están respaldando el documento elaborado por su ejecutiva provincial (Gipuzku Buru Batzar) en el que se cuestiona implícitamente la representatividad democrática de la Asamblea Nacional, el máximo organismo decisorio de este partido. Las votaciones registradas hasta ahora, en vísperas de una eventual ruptura, confirman la supremacía de los críticos y reproducen con bastante aproximación la relación de fuerzas acuñada últimamente en Guipúzcoa entre ambas tendencias.Si, como se espera, la mayoría del resto de las juntas municipales secunda esta postura, la asamblea regional de Guipúzcoa, a celebrar hoy en Zarauz, refrendará necesariamente el documento que los críticos presentaron el pasado sábado en la asamblea nacional de Artea como alternativa al escrito del sector oficialista.

Markel Izaguirre, presidente de la ejecutiva guipuzcoana, apuntó ayer la posibilidad de que la asamblea regional faculte a los 15 apoderados de la provincia en la asamblea nacional que se celeba mañana en Artea a negociar con el sector crítico una fórmula que permita unificar los dos textos. Los críticos guipuzcoanos rechazan tajantemente la expresión plena legitimidad, que los oficialistas adjudican a la asamblea nacional, y proponen legitimidad reglamentaria.

Los guipuzcoanos estarían dispuestos a retirar la palabra reglamentaria si el otro sector hace lo propio con el calificativo plena. Las diferencias pueden parecer mínimas, pero la sensación de una inminente ruptura se ha extendido ya en una y otra tendencia.

Un número indeterminado de afiliados bilbaínos del sector crítico ha recibido escritos de sus juntas municipales en los que se les exige que expliquen el porqué de su abstención en las pasadas elecciones y se les comunica que serán llevados a los tribunales del partido si no justifican razonablemente su actitud, según informa desde Bilbao Íñigo Gurrutxaga.