La junta de la Caja Rural de Reus acuerda su venta a Cajamadrid

La junta general extraordinaria de socios de la Caixa Rural Provincial de Reus autorizó ayer al consejo rector la firma de la cesión global de los activos y pasivos de la entidad a Cajamadrid. Con este acuerdo quedó lista -la venta ya anunciada días atrás- y ahora tan sólo falta el permiso del Banco de España.La junta general extraordinaria decidió también disolver la entidad y nombrar al presidente, Maties Sanahuja; al tesorero, Francesc Bover, y al secretario, Ramón Llauradó, como liquidadores de la Caixa Rural Provincial. La normalidad fue la tónica destacada de la asamblea, que duró tan sólo una hora y cuarto. Entre los asistentes se encontraba una delegación de Cajamadrid presidida por el jefe de la asesoría jurídica, Felipe Ruiz de Velasco, que mostró su satisfacción por el acuerdo de la junta. A preguntas de los periodistas dijo que "con la operación, Cajamadrid ayuda a una entidad financiera con problemas y además consigue su propia expansión".

Por su parte, el presidente de la Caixa Rural Provincial, Maties Sanahuja, señaló que la alternativa Cajamadrid reportará "la salvación de la entidad, la garantía de los puestos de trabajo, de las secciones de crédito y de la propia Unió Agrària". En un momento de su intervención en el transcurso de la asamblea el presidente se refirió a quienes consideran que con el acto de ayer se ha producido el entierro de la caja rural. "Es un entierro alegre", dijo. "Podría haberse dado el caso de haber asistido a .un entierro con muchas lágrimas".

Con la compra de la Caixa Rural Provincial, Cajamadrid se hace cargo de los más de 2.000 millones de pesetas de pérdidas que tiene la entidad reusense. De éstos, 860 corresponden al riesgo de la Unió Agrària Cooperativa. La operación de saneamiento correrá a cargo exclusivamente de Cajamadrid, ya que no contará con ningún tipo de ayudas oficiales.