El regreso de Guerra

Una consecuencia secundaria de la minicrisis que prepara Felipe González será una mayor dedicación del vicepresidente, Alfonso Guerra, a los temas relacionados con el partido, según creen saber medios del PSOE. Estos medios consideran "poco probable" la salida de Guerra del Gobierno, "porque ello rompería el equilibrio actualmente existente"; pero, en cambio, apostaban por una acentuación de su carácter de vicesecretario general socialista, "especialmente cuando ya va teniendo que prepararse el partido para dos elecciones autonómicas y unas generales".La aparición de Guerra -y no de González, como ocurrió en otras ocasiones similares- en la conferencia de prensa posterior a la reunión del comité federal del PSOE, celebrada hace dos semanas, parece abonar esta tesis. La necesidad de potenciar el partido, en el que los propios mandatarios socialistas reconocen algunos signos de parálisis, constituye una de las razones principales que demandan una mayor presencia del vicesecretario general en la calle de Ferraz.

El PSOE deberá afrontar en los próximos meses campañas de extensión de la militancia -federaciones como Madrid apenas han crecido en 15 afiliados en el último año-, de explicaciones de las realizacíones del Gobierno y de lo que es la Alianza Atlántica, tareas todas que están pendientes y algunas de las cuales sufren retraso, ínmerso como ha estado el partido en un proceso complicado de congresos regionales y provinciales.