Pragmatismo ibérico

El presidente Ronald Reagan permanecerá 40 horas en Madrid y bastante menos en Lisboa. Los estrategas presidenciales emparejan casi absolutamente estas dos visitas y las califican como una demostración de apoyo de Estados Unidos al fin del aislamiento de "dos democracias relativamente recientes".Un alto funcionario de la Administracíón estadounidense subrayó el carácter pragmático y las políticas realistas de Felipe González y Mario Soares, loque garantizará, a su juicio, que las entrevistas de Reagan con los dos jefes de Gobierno estarán exentas de cualquier tensión.

En Madrid, el futuro de España en la OTAN y Centroamérica serán los asuntos principales de las entrevistas. Sobre el primero, Reagan entiende que sería perjudicial presionar a Felipe González, y no lo hará durante la visita. El Gobierno socialista parece que ha dado ya seguridades de que el proceso está controlado, y EE UU no quiere aparecer entrometiéndose en un asunto que sabe despierta una fuerte oposición en la opinión pública. "Nosotros ya hemos dicho que deseamos que España permanezca en la OTAN; los españoles lo saben y, por tanto, no nos cabe decir mucho más", afirman en el Departamento de Estado. Las relaciones Este-Oeste serán también objeto de discusión en Madrid, "dado el interés que Felipe González ha demostrado por el tema del control de armamentos", explicó un portavoz de la Administración de Reagan.

Sobre Centroamérica es probable un diálogo de sordos, dadas las divergentes posiciones de Reagan y el presidente del Gobierno español. En Washington ya se ha advertido que Reagan "no será tímido" a la hora de explicar su política beligerante contra Nicaragua, en la que cree firmemente.