Ferrovial no formará parte del grupo comprador de Hispano Alemana

La empresa constructora española Ferrovial no formará parte del grupo que liderado por el Banco Arabe Español (Aresbank) intenta desde hace meses presentar una oferta por la constructora perteneciente al grupo Rumasa. La caída de Ferrovial del grupo comprador ha causado sorpresa en medios bancarios y de la construcción, a pesar de ser suficientemente conocidas las dificultades que encontraba Aresbank para poner a punto una oferta que en varias ocasiones se anunció como cosa hecha.Aresbank, sin embargo, sigue empeñado en aglutinar una oferta para Hispano Alemana y ya trabaja activamente en la composición del accionariado de un nuevo grupo comprador, nucleado también en torno a intereses mayoritariamente árabes. La filosofía de este nuevo grupo está siendo analizada y podría contener variaciones sustanciales, incluso que en ella no figurara ninguna empresa constructora española. Las mismas incógnitas persisten en torno a la participación de Aresbank en el accionariado. Exigencias de Ferrovial

¿Por qué ha encallado la operación Ferrovial-Aresbank-ABC Bank? Durante semanas se daba por seguro que Ferrovial tomaría la mayoría, el 60% del capital social, de la nueva Hispano Alemana, con el 40% restante en manos de Arab Banking Corporation y una participación que pudiera ser simbólica de Aresbank.

Según fuentes del sector de la construcción, Ferrovial pretendió controlar plenamente la gerencia de la nueva empresa, lo que provocó los recelos de sus socios en la oferta. Para otras fuentes, Ferrovial tenía el punto de mira puesto en una serie de negocios a desarrollar con el socio árabe, presumiblemente en ese mercado, que era lo que de verdad le interesaba de la operación Hispano Alemana, mientras que el grupo árabe entendía que debía volcarse en el futuro de Hispano Alemana como empresa singular.

Como es sabido, Ferrovial pretendió hacerse desde un principio Hispano Alemana en solitario, aunque las condiciones pretendidas obtuvieron la respuesta negativa de la Dirección General del Patrimonio. La exigencia de una serie de contrapartidas posteriores, ya en el seno de la oferta nucleada por Aresbank, han impedido la llegada a buen puerto de la operación. Para encontrar soluciones, sin embargo, se han venido ensayando en las últimas semanas un sin número de posibilidades.

Una de ellas consistió en rebajar la participación de Ferrovial al 40%, mientras la parte árabe asumía el 60% restante. La explicación que se daba al cambio aludía a que el Patrimonio veía con incomodidad la paradoja de que una empresa a la que se había negado el 100% de Hispano Alemana en un principio, terminara por hacerse con la mayoría por otro camino. Aresbank intenta ahora cohesionar a un nuevo grupo de accionistas que pueda formular una oferta que sea admisible por el Patrimonio, llevando a buen puerto la compra de Hispano Alemana.