Suárez Cuevas, astuto escapado, ganó el primer sector matinal

Suárez Cuevas, del equipo Hueso, puso de manifiesto en el primer sector (Segovia-Torrejón) que ha sido uno de los escapados más astutos de la presente Vuelta a España, porque, al menos, demostró habilidad para elegir el momento más propicio en el que era factible ganar una etapa sin que el resto de corredores presentara una gran oposición. Ante 100 ciclistas cuyo único deseo era llegar a casa y otros dos que esperaban nerviosos la llegada de la tarde para dirimir el liderato, Suárez Cuevas madrugó y decidió escaparse cuando sólo habían transcurrido seis kilómetros del llamado primer sector de la 18 etapa.Ofensa

Su acción resultó una ofensa para sus compañeros, que odiaban el simple pensamiento de tener que esforzarse, por enésima vez, para neutralizar un escapado. Y, además, hacía frío. Fue así como el corredor el Hueso cogió carrerilla, llegó a tener una ventaja de más de 21 minutos sobre el pelotón y disfrutó de una victoria tardía pero igualmente efectiva. Nadie intentó oponerle resistencia y así fue como se presentó a la desorganizada meta de Torrejón con 16.56 minutos de adelanto sobre sus seguidores. Sólo para el futuro doctor Hernández Salvador (Reynolds) ayer resultó un mal día, porque al caer se fracturó una clavícula, y tuvo que abandonar.

Hubo, eso sí, instantes de emoción cuando en la confusión general se pensó que el líder Caritoux se había quedado en un grupo rezagado, tras un corte que se produjo en el pelotón por Paracuellos del Jarama.

Las cámaras y los micrófonos buscaron un corredor con maillot amarillo pero es que Caritoux corrió con el jersey habitual del equipo. El líder francés estaba ya siendo entrevistado por periodistas de su país, que han engrosado en muy poca cantidad el número de sus enviados especiales para atender a un compatriota que parece que va a ganar la Vuelta a España, aunque sólo sea por seis segundos.