Reunión de alto nivel en Interior sobre seguridad ciudadana en Madrid

El ministro del Interior, José Barrionuevo, mantendrá esta mañana una reunión con altos dirigentes de su departamento para tratar sobre el deterioro de la seguridad ciudadana en Madrid, según informó ayer un portavoz oficial. Esta fuente informativa anunció como "inmediata" la aplicación de medidas policiales -controles selectivos y redadas por sectores, entre otras-, para el refuerzo de la seguridad en las calles.En la tarde de ayer lunes, festividad de San José, el ministro del Interior convocó a la reunión, que se celebrará esta mañana, al director de la Seguridad del Estado, Julián San Cristóbal; al director general de la Policía, Rafael del Río; al director general de la Guardia Civil, teniente general José Antonio Sáenz de Santamaría, y al gobernador civil de Madrid, José María Rodríguez Colorado, para tratar sobre el tema del deterioro de la seguridad ciudadana en Madrid.

En relación concreta a los últimos crímenes que han golpeado al sector del pequeño comercio, el citado portavoz oficial señaló que "el gobernador civil de Madrid está dispuesto a recibir cualquier sugerencia". Descartó la posibilidad de que se autorice a autoarmarse a los comerciantes, corno colectivo, o a otros grupos, "lo que aumentaría la inseguridad ciudadana, pues el mantenimiento de la seguridad corresponde exclusivamente a las fuerzas policiales".

Aclaró que "se han mantenido contactos con representantes de las organizaciones empresariales y se estudian conjuntamente determinadas medidas que pudieran adoptarse, aunque no hay nada definitivamente acordado".

Respecto a las medidas concretas que se adoptarán en las calles madrileñas en los próximos días, el portavoz apuntó "una nueva acometida de los controles policiales selectivos y eventuales en diferentes zonas urbanas en las que se producen alzas puntuales de la actividad delictiva".

Otra de ellas consistirá en el "acotamiento de determinados barrios o zonas donde se harán retenciones e incluso detenciones de personas, aunque no en la forma estricta de una redada". La fuente informativa no precisó detalles "precisamente por razones de seguridad", y remachó que "se ha redoblado la vigilancia en las calles y se incrementará".