Los autores de la matanza de periodistas peruanos serán juzgados

Víctor Andrés García Belaúnde secretario del Consejo de Ministros peruano y sobrino del presidente Fernando Belaúnde, aseguró en Valladolid que los campesinos que mataron hace varias semanas a ocho periodistas en la zona de Ayacucho serán juzgados "porque nadie puede vivir hoy al margen de la ley en Perú". "El problema", añadió, "es cómo realizar un juicio justo. Por los datos que tenemos, en la matanza participaron alrededor de trescientas personas; es necesario, por tanto, determinar quiénes fueron los autores directos. De lo contrario, ¿cómo juzgar a trescientos, cómo aplicarles las penas?El secretario del Consejo de Ministros de Perú, que tiene rango de ministro, señaló también que hay que considerar los atenuantes que existen en el caso. "Estos campesinos son gente muy ignorante, que se aísla voluntariamente en las alturas de los Andes, que no baja jamás a los valles, que son en más del 80% quechuahablantes y que ni tienen ni desean contactos con las demás comunidades peruanas. No les interesa todo lo que venga dé fuera, lo rechazan porque estiman que puede contribuir a la desaparición de su grupo. Tampoco saben qué es un periódico, y mucho menos, un periodista".

Imprudencia

Para García Belaúnde hubo cierta imprudencia en la actuación de los periodistas, puesto que sabían que Ayacucho se halla en estado de emergencia y que debían pedir protección, pero se movieron sin dar cuenta a nadie.La reconstrucción de los hechos ha permitido saber "que salieron de Ayacucho en un coche alquilado, despidieron al chófer, le pagaron y continuaron a pie subiendo casi doce horas hasta las alturas de los Andes donde viven los campesinos, para comprobar personalmente si éstos apoyaban o no a los terroristas". Llevaban un guía que, según García Belaúnde, fue confundido por los campesinos con un miembro de Sendero Luminoso. "A su vez", continué, "los periodistas creyeron que les atacaban guerrilleros, y uno de ellos sacó una bandera roja. Aquello fue la señal definitiva para los campesinos, que utilizaron sus medios rudimentarios de comunicación para convocar a los habitantes de otros poblados. Sucedió una especie de Fuenteovejuna".

Está claro, según explicó el secretario del Consejo peruano, que los informadores no recibieron ningún balazo. "Para demostrar lo infundado de estos rumores nos vimos obligados a realizar una exhibición macabra: desvestir y volver a vestir los cadáveres. Se vio que no tenían un solo impacto de bala y que, por tanto, no habían sido atacados por guardias civiles vestidos de paisanos".

García Belaúnde, que regresaba de Austria y se detuvo en Valladolid para visitar a sus compañeros de estudios de Derecho en la capital castellana, realizó también una pequeña autocrítica. "Cuando Acción Popular llegó al Gobierno, ninguno de sus miembros creyó que tendría que enfrentarse a un movimiento guerrillero armado, y no se preparó a las fuerzas policiales para esa contingencia". Según García Belaúnde, Sendero Luminoso no cuenta siquiera con el apoyo de Cuba o China.