Apoteósico triunfo del Sevilla

A los sevillistas que estuvieron anoche en el Sánchez Pizjuán no les importaría subir a Manolo Cardo a los altares aprovechando que el viernes Juan Pablo II beatificará en Sevilla a sor Angela, pero como eso sólo es fútbol-ficción se conformaron con sacarlo a hombros del estadio como a Manolo Vázquez en La Maestranza.A la derecha y a la izquierda de Manolo Cardo a los sevillistas no les importaría colocar a Santi, López, Magdaleno y Pintinho, aunque fuera sólo en calidad del concepto jurídico o machadiano de "hombres buenos", porque ayer como el resto del equipo lo fueron.

Inenarrable el ambiente rojiblanco de banderas en el Sánchez Pizjuán en una noche histórica que diificilmente olvidarán los sevillistas y en la que los locales bordaron el fútbol ante un PAOK, que si en la primera parte inquietó con sus peligrosos contraataques, en la segunda se tuvo que rendir ante esa máquina infalible de hacer buen fútbol -¡qué bien lo hizo Pintinho!- que fue el Sevilla.