La plantilla de Cantábrico y Riera acepta el plan de regulación de empleo

La asamblea de trabajadores de los Astilleros Cantábrico y Riera dio ayer su aceptación al proyecto empresarial de regulación de empleo, que afectará inicialmente a 336 miembros de su plantilla. Este acuerdo de los trabajadores y el anuncio de la concesión de un crédito de trescientos millones de pesetas por parte del Gobierno y otro de 88 millones de la Caja de Ahorros de Asturias para pagar los salarios atrasados permitirán reanudar la actividad laboral en estos dos astilleros, que se encuentran prácticamente paralizados.La familia Rivas, propietaria de Astilleros Cantábrico y Riera, pretende reflotar la empresa a partir de estos créditos y de la regulación de empleo. Los trabajadores llevan cuatro meses sin cobrar por la insolvencia de la sociedad. Durante este tiempo protagonizaron espectaculares movilizaciones, con las que se solidarizaron las plantillas de los demás astilleros de la bahía gijonesa, cuya supervivencia, con la excepción de Constructora Gijonesa, propiedad del INI, se encuentra amenazada, debido a la caída de la demanda en el sector de la construcción naval. Los empresarios privados ven como única alternativa viable la creáción de un holding, del que formarían parte todos los astilleros de Gijón.