El policía foral de Navarra desaparecido puede ser miembro de ETA

El policía foral Francisco Javier Martínez Nogales, de veintisiete años de edad, desaparecido el pasado miércoles en Pamplona, podría ser miembro de ETA, según manifestó anoche, mediante una nota pública, el Mando Unico para la Lucha Contraterrorista (MULC). El pasado domingo por la mañana fue encontrado su coche, un Talbot Horizont, matrícula NA-0553-L, perfectamente aparcado y cerrado en una calle del barrio Ermitagaña de Pamplona. En el interior del vehículo, según la información policial, han sido hallados 26 kilos de Goma 2, otros materiales para fabricar explosivos y abundante munición.Asímismo, señala el MULC que en el domicilio del policía foral han sido encontrados, entre otros efectos, barbas postizas y la documentación del seguro del coche Seat 131, matrícula NA-9269-E, que el día anterior a la desaparición de Javier Martínez había sido destruido por un potente artefacto, "que la banda de ETA Militar había preparado para atentar contra los miembros de la policía". La documentación había sido arrebatada por los terroristas al propietario del vehículo, a quien fue robado. Por todo ello, la nota concluye que el policía foral desaparecido es, presumiblemente, miembro de la banda de ETA autora de los últimos actos de violencia en Pamplona.

El citado policía foral se encontraba el pasado día 17, miércoles, de servicio en el palacio de la Diputación Foral de Navarra, y hacia las 10.30 de la mañana pidió permiso a sus superiores para salir a una entidad bancaria, a lo que se accedió. Tras quitarse el uniforme y ponerse su ropa de calle, salió del palacio foral. Al parecer, no acudió a la entidad bancaria. Posteriormente, hacia el mediodía, fue visto por última vez montado en su coche junto a un joven cuya identidad se desconoce en las proximidades de la residencia Langillekoa de Ansoaín.

Francisco Javier Martínez Nogales es natural de Allo (Navarra) y con residencia en Pamplona, y llevaba un año en la policía foral. Era muy reservado y su desaparición ha causado una profunda sorpresa entre sus compañeros. Nadie se podía explicar los motivos de su ausencia. Sus familiares han manifestado que no tenía ningún motivo para marcharse, ya que se encontraba muy contento de su nuevo trabajo.

Polémica con 'Egin'

La nota del MULC arriba recogida señala que la policía había sido alertada "por medio del diario Egin", de la sustracción del vehículo y su ubicación, "después de haber sido utilizado por los terroristas, sin especificar que en su interior contenía una trampa explosiva". La delegación en Pamplona de Egin contestó ayer a esta alusión, precisandoque a este diario únicamente se le comunicó telefónicamente la situación de "un artefacto sin explosionar" y la existencia de una persona atada a un árbol, datos que fueron comunicados a la policía. La redacción de Egin en Pamplona considera que "la frase, que aparece en la nota, 'sin especificar que en su interior contenía una trampa explosiva', sin saber a quien se refiere, es como mínimo de una ambigüedad sospechosa, pudiendo entenderse que desde Egin se había ocultado esa información a la policía".