Los comunistas interpelan al Gobierno

«La creación del parque nacional de la montaña de Covadonga en 1918 poco o ningún beneficio, cuando no perjuicios, ha aportado a los habitantes de la comarca», según el texto de una pregunta que acaba de formular al Gobierno, a través de la Mesa del Congreso, el diputado comunista asturiano Horacio Fernández Inguanzo, quien argumenta que el oso, el urogallo, el quebrantahuesos y las martas se encuentran en trance de extinción, mientras que no se consiguió impedir la presencia de las explotaciones mineras de Comeya y La Picota, ni la instalación de un hotel en la loma de Entrelagos o los aprovechamientos hidráulicos en el Restañu.Estas transgresiones de la ley del parque, muchas veces con el visto bueno de la Administración, unidas a unas comunicaciones -con la excepción de la carretera que va desde Covadonga al lago de la Ercina-, en estado lamentable, y a las basuras y desechos que llevó aparejado el turismo a las zonas que cuentan con una estratégica red de refugios (Ario, Vegarredonda, Ordiales, Enol...), hacen comprensible para el Grupo Parlamentario Comunista la tajante oposición de los vecinos a la ampliación del parque de la montaña de Covadonga a los tres macizos de los Picos de Europa (Cornión, Urrielles y Andara), ya que no implicará más que trabas, sin contrapartidas.