Los socialistas ofrecen su colaboración al Gobierno vasco

El intento por parte del PSOE de Euskadi de poner en marcha una vía de «actuaciones concertadas» entre el Gobierno vasco y la oposición, en la solución a temas como la crisis económica, la violencia o el desarrollo autonómico, condicionantes del futuro de Euskadi, podría ser acaso el aspecto más destacado de la entrevista que el pasado lunes celebraron en Vitoria Carlos Garaikoetxea y Txiki Benegas, a iniciativa de este último.El líder del principal partido de la oposición parlamentaria vasca -en ausencia de Herri Batasuna- había mostrado gran interés en que se llevara a cabo este encuentro, destinado a abrir cauces de diálogo con el ejecutivo; un diálogo que, hasta la fecha, no se había producido de forma oficial.

Txiki Benegas expresó a Garaikoetxea su convencimiento de la necesidad de participación de los partidos parlamentarios que desde el principio apoyan el Estatuto vasco en el seguimiento del proceso de transferencias. A tal efecto le propuso la creación en el seno de la Cámara de una comisión especial de seguimiento.

Dentro del capítulo referido al desarrollo del Estatuto, el portavoz del Grupo Socialista transmitió al lendakari el deseo de su partido de que las leyes fundamentales, que en los próximos meses ha de debatir la Cámara legislativa vasca lleguen a la misma avaladas por el respaldo de una amplia mayoría parlamentaria.

En esta línea de invitación a las actuaciones concertadas, Benegas propuso a Garaikoetxea un plan de actuación para hacer frente a la crisis económica por la que atraviesa Euskadi y, en especial, grandes empresas (Altos Hornos, Echebarría, Aceros de Llodio, Papelera de Irún), que conocen momentos críticos. Cree el PSOE que, aunque el Gobierno vasco no tiene competencias en esta materia, no puede permanecer impasible, y en tal sentido le sugirió la creación de un consejo económico social, como lugar de encuentro entre el Gobierno, patronales y sindicatos.

Por lo que hace al tema de la violencia y orden público, Benegas, al referirse al tema de la Junta de Seguridad, prometió al lendakari el apoyo y la presión de su partido «a todos los niveles» para lograr su pronta constitución y funcionamiento. Con respecto a la violencia; el líder de la oposición invitó al PNV, a través de Garaikoetxea, a formar parte de un frente contra los violentos.