Fracasado intento de ruptura en la huelga de transportes de Pontevedra

Después de once días de paro en las empresas del transporte en la provincia de Pontevedra, ayer estuvo a punto de romperse la huelga al iniciarse la actividad en algunas empresas de viajeros y las principales de mercancías. Bastantes autobuses de transporte escolar, sector que de forma más espectacular estaba siendo afectado por la huelga, distribuyeron ayer a los niños por los colegios, que se aprestaron a modificar los horarios de jornada continuada implantados al producirse la huelga.Por la tarde, algunos piquetes impidieron el regreso de los autobuses. Al parecer, todo se debió a un mal entendido y -según fuentes sindicales- a una maniobra de los empresarios para romper la huelga sin contrapartidas en la negociación del convenio.

En bastantes empresas se interpretó como una orden una recomendación del gobernador civil en el sentido de que las que no tuviesen declarada formalmente la huelga deberían trabajar, y así lo transmitieron a sus trabajadores, amenazando, incluso, en algunas que tienen declarada la huelga en forma legal, con despidos.

Desde las primeras horas de ayer los piquetes volvieron a actuar sin que se produjesen incidentes, y bastantes trabajadores volvieron a parar al ser informados de la situación.

En lo que se refiere a la negociación del convenio colectivo, parece que podría darse algún contacto informal entre las partes, aunque los representantes de las centrales sindicales que dirigen la huelga estiman que continuarán el paro durante la próxima semana. Según fuentes sindicales, representantes de las centrales de Valencia se han ofrecido a parar los camiones de Pontevedra en esa provincia, si la huelga se endurece.