Los nuevos precios de los billetes

El billete sencillo costará diez pesetas. El aumento del resto de las tarifas es el siguiente: billete de ¡da y vuelta, quince pesetas; billete de domingos y festivos, quince pesetas; abono semanal de seis viajes de ¡da y vuelta, sesenta pesetas, y abono mensual de veinticinco viajes de ¡da y vuelta, 240 pesetas.El acuerdo de aumento de precios fue adoptado por la Comisión Provincial de Precios, reunida el miércoles 20 de diciembre pasado en el Gobierno Civil.

Mientras el delegado de Circulación del Ayuntamiento, Plácido Alvarez, calificó la subida de «razonable», el presidente del consejo . de intervención de la Compañía Metropolitano, Jaime Badillo, la consideró como «insuficiente».

El señor Alvarez adujo que la Comisión Provincial de Precios estaba limitada por lo dispuesto en los pactos de la Moncloa y no podía hacerse nada más.

El señor Badillo argumentó su opinión de que la subida era insuficiente en base a que el consejo de intervención cifró en doce pesetas el precio mínimo del trayecto, lo que habría supuesto que el usuario corriera con el 33% de la financiación del servicio y el Estado con el restante 67%. Mientras que de esta manera será el Estado quien tenga que aportar más dinero.

El señor Badillo ha manifestado, asimismo, que se ha cumplido la promesa de no aumentar el precio dentro de 1978, así como el ofrecimiento de hacerla coincidir con «algo a cambio» que hiciera notar al usuario las mejoras del servicio que se realizan.

Las protestas

Sin embargo, la opinión del presidente del consejo de intervención del Metro no es compartida por todas las fuerzas políticas y sociales.

La Federación de Asociaciones de Vecinos, al tenerse conocimiento del anuncio de la subida de tarifas, se manifestó en su contra, por considerar el incremento como excesivo para las capas sociales más bajas, así como porque los principales beneficiarios, como son los grandes almacenes, etcétera, siguen sin ser gravados; asimismo, manifestaron su criterio respecto a que el Metro continúa siendo «sucio, lento, inseguro y falto de personal». De esta forma, dicha Federación considera que no se puede justificar dicha subida con la entrada en servicio del tramo más corto del recorrido.

Los exiguos dos kilómetros que supone el tramo Alfonso XIII-Esperanza tampoco fueron entendidos por la ORT como algo a cambio de lo cual se justifique la actual subida de tarifas. Este partido ha calificado la subida de «improcedente».

La ORT señaló también que el usuario no debe pagar más que una parte política del servicio, entendiendo necesaria la creación de un «canon del transporte para todos aquellos que se les considere beneficiarios del mismo: grandes empresas, centros comerciales, inmobiliarias y nuevas construcciones».